La cueva-sima de la Serreta se localiza en el Espacio Natural Protegido del Cañón de Almadenes. Por este cañón discurre el río Segura encajonado entre paredes verticales que en algunos tramos llegan a alcanzar 100 metros de altura. La naturaleza cárstica del entorno ha dado lugar a una gran concentración de cuevas, simas y abrigos que fueron utilizadas por el hombre prehistórico como refugio.
En muchas de ellas se han encontrado restos arqueológicos y pinturas rupestres, evidenciando la importante actividad humana de este paisaje en épocas pretéritas.
La Serreta se abre en la margen izquierda de dicho cañón de Los Almadenes, en un magnífico paisaje de gran impacto visual y prácticamente inaccesible desde el exterior. Las dimensiones y la especial disposición de la cavidad la alejan de la tradicional tipología de los abrigos con arte rupestre, lo que hace considerarla más como una cueva que como un abrigo propiamente dicho.
Esta especial disposición ha permitido su difícil localización y su difícil acceso, justificando la escasa intervención humana, lo que ha permitido una buena conservación de las pinturas y del propio interior de la cavidad.